Es importante aprovechar esta fecha para reflexionar acerca del rol del padre en éstos días.
Cada vez, más hombres deben ocuparse de tareas que antes sólo eran competentes de la mujer. Esto se debe como todos sabemos a la entrada de la mujer en el mundo laboral, desde hace tiempo, y en la necesidad de conciliar la vida laboral y familiar. También vemos cómo el varón se fue integrando poco a poco en el embarazo, parto y cuidados del recién nacido. Así también su imagen dentro del núcleo familiar, por suerte, ha cambiado, ya que participa en las tareas del hogar, en la crianza de los hijos, además de mantener económicamente a la familia, junto con la mujer. De modo que la presencia del padre en casa y para nuestros hijos es importantísima.
Un padre que acompaña, estimula, escucha, comprende, ayuda. Un padre que cuenta cuentos, que juega, que dá de comer, que asiste a reuniones escolares. Un padre que arropa en la cama, que dá besos. Un padre presente. Qué suerte!
Felicidades para todos ellos, para los que a pesar de las horas de trabajo, pueden compartir con sus hijos aquello para lo que los necesiten.
Gracias a todos los papás.
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